Los
viejos, los hermanos, y los hijos son fundamentales en toda familia
pero los primos son parte muy importante de la historia personal de uno
desde la niñez. Con mi primo Patricio las cosas no andan bien desde hace
algunos años pero no siempre fue asi. No les quiero mentir, era un
momento especial para mi cuando me tocaba ir a jugar a su casa o que él
viniese a la mía, montábamos una fiesta. Pero siempre tuvimos
competencia entre nosotros. Siempre me tuvo envidia, encima soy grandote
y me fue mejor en la vida, y el más pequeño de cuerpo y lampiño, que la
simple situación de que por la calle pensaran que era mi hijo, a él lo
mataba. Pero es mi primo, nos criamos juntos en el barrio. Recuerdo que
cuando tenía problemas para montar la fiesta gloriosa que me gusta hacer
cada domingo (hasta el día de hoy), lo llegué a hacer
en su casa; y una vez hasta me bancó pegándole un sopapo a un cheto
millonario que me quería cagar mi fiesta (algo que nunca pensé que
pasaría). El tema es que nos vemos este fin de semana de nuevo, después
de bastante tiempo, y son muchos los recuerdos. Pero mi primo está muy
celoso, me va muy bien, soy más fachero, y hace un año me
puse de novio con la minita de mi sueños, que no me daba bola nunca, y
mi primo me gastaba, aunque todos están enamorados de ella, y tuvieron
que
ver mi viaje con la histérica a Marruecos (este año cortamos, me dejó
por el cheto, pero le
sigo el rastro). La cosa es que creo que quiere ser como yo, su primo
mayor, porque en los juegos siempre le ganaba, me codeaba con amigos
importantes, mientras él desapareció varios años para rodearse de amigos
sin futuro. Nos conocemos de toda la vida, y también nos hemos pegado
eh, pero no lo digo con orgullo. No sé Patricio si estarás leyendo esto,
sólo decirte que tu primo está armando una linda fiesta. Hablé el otro
día con Junior, mi pibe, y lo entendió. Si querés, estás invitado a ser
testigo de la misma, te voy a poner unos temas para que bailes, PERO NO
ROMPAS NADA!!!
Pulpo.
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