Por ejemplo, en la actual versión que se puede consultar en su página web (http://www.rae.es/) se encuentra la definición de “lobby”.
lobby. (Voz ingl.).
Grupo de personas influyentes, organizado para presionar en favor de determinados intereses.
De esta definición se debería resaltar: influyentes, organizados, presionar e intereses. ¿Por qué?, por lo siguiente.
Parece ser que la maquinaria generadora de preconceptos, ha empezado a moverse nuevamente y sin ningún pudor (lo de influyentes de la definición).
En la edición de hoy del periódico deportivo del grupo multimedio más famoso de Argentina (lo de organizados de la definición), aparece en la tapa una nota que denuncia que al equipo del fracturador impune “hace 341 días que no le cobran un penal a favor” (lo de presionar de la definición).
En la nota de marras, hace un análisis de que “el millonario acumula 29 fechas sin penales a favor, lapso en el que los árbitros obviaron cobrarle al menos 11. Hay malestar en el plantel y los dirigentes. ¿Se cortará?”.
En los últimos casi 20 años accedimos desde nuestro país a una transformación a mayor velocidad de muchas cosas (de las pocas buenas y de las muchas malas). Entre ellas, las de llamar a los periodistas “formadores de opinión”, y en ese rol, y en busca de seguir incrementando ventas, dicen lo que quieren escuchar los que les pagan o los que les compran, que al final será efectivo (en doble acepción, y es la parte de interés de la definición de lobby).
Que se cuente con el beneplácito mediático para recurrir a la mendicidad dialéctica para que mañana o pasado le den un penal es algo totalmente adecuado a los tiempos que vivimos.
Tal vez muchos recordemos partidos de estos mismos clubes “perjudicados”, llevados hasta el minuto 97 para lograr un empate, expulsiones de contrarios injustificadas, pequeñas formas de inclinar la cancha cortando el juego del rival y demás menesteres muy habituales en los años de ese equipo desde que se ligó a los poderes políticos, y conjuntamente con su eterno rival pasaron a ser los amos y señores del fútbol local.
En la misma edición de hoy de la publicación, cuando se menciona a San Lorenzo, lo hace en estos términos: “Méndez alzándose con los tapones, relamiéndose, y recién saciándose al incrustarse en la espalda de Falcao”. (Antes que nada una pregunta ¿No había fallecido Migré??). La patada de Méndez existió, fue de verdad, no fue de Titanes en el Ring, fue desmedida, casi lo parte, y mereció expulsión por roja directa. Pero hasta pusieron a Méndez como Kun-Fu Panda en un dibujo de cabecera de página y no hablaron ni 5 minutos de la no expulsión de un jugador por tijera desde atrás con fractura del rival. Se sugería hace poco la actuación del tribunal de oficio por un golpe de Bergessio en el área rival a su defensor, pero no se hablaba de los manotazos que recibió previamente. El golpe de Bergessio existió, es cierto, como lo demás.
Hace poco vimos como su teórico enemigo conseguía postergar partidos con un argumento menos que el que se le negó al Ciclón, alguna vez, y nos hicieron ir diezmado a su cancha por ceder 5 jugadores a la AFA y no permitir postergación. Claro, estábamos segundos de ellos, y podíamos cortar le negocio de los vendedores de noticias.
Qué linda era la época en que el fútbol era un deporte!!!!
Por si a alguno le interesa, hay más (muchas más) definiciones en el diccionario, pero como que no puedo salir del tema y sólo busqué las siguientes:
Lameculos: com. vulg. Persona aduladora y servil.
Pesetero, ra. adj. Dicho de una persona aficionada al dinero.
Sofisma. m. Razón o argumento aparente con que se quiere defender o persuadir lo que es falso.
Aguante Ciclón
Segola
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