El nombramiento de Furchi ¿Maniobra o provocación?

El nombramiento del juez Furchi para dirigir el clásico del domingo (clásico por historia y por grandeza que el stablishment ha pretendido ignorar) es de difícil valoración aunque, sin uno proponérselo siquiera, invita a todo tipo de elucubraciones o sospechas ¿Que se pretende con este nombramiento?

Luego de sus desastrosa actuación del último domingo su inclusión no va a ser entendida ni por los unos ni por los otros ¿Es una actitud arrogante con ánimo de sentar precedentes? ¿Contra quien?

Los simpatizantes de San Lorenzo tenemos derecho a la duda, otro tanto, seguramente, sucederá con los del rival pero de eso que se encargue otro. San Lorenzo se está jugando el campeonato, el rival y sus hinchas, se están jugando su prestigio y su historia ¿A que viene este nombramiento?

Se puede pensar en provocación, según el desarrollo del partido habrá quien hable de maniobra y aquí prefiero hacer mutis por el foro porque las opciones son muchas y variadas.

Convendría recordar a los estamentos correspondientes que San Lorenzo de Almagro quiere ganar el campeonato en buena lid, que no quiere favores arbitrales, penales dudosos, cuando no inexistentes, goles “manuales”, goles anulados injustamente como el anulado a Méndez contra el equipo de Villa Luro, jugadores rivales que, como Ortega siguen jugando luego de agredir violentamente a uno de los nuestros o como la continuidad en el campo del jugador del equipo rojinegro rosarino que barrió violentamente y en condición de último hombre a Lavezzi el sábado pasado. Tampoco que se nos amoneste a jugadores como se hizo con Silvera dando lugar a fundadas sospechas. Por no hablar de la intimidación que con un tarjeteo indiscriminado se nos condicionó en el primer tiempo en La Plata mientras el local golpeaba de forma aviesa.

Los hinchas de San Lorenzo queremos ganar el campeonato, no comprarlo. Lo queremos ganado en las canchas y no regalado. Confiemos que el Sr. Furchi lo comprenda bien y con él sus auxiliares de línea. Y ya puestos a pedir, pidamos justicia en los partidos que juegan nuestros directos rivales. Ya que nuestro amable presidente no lo hace, desde este modesto blog y a la distancia, lo hacemos nosotros (o por lo menos quien esto firma).

Osvaldo Álvarez